Tomás Fischer es un gerente de una importante empresa industrial y un entusiasta de la tecnología.
Su pasión en el rubro lo hizo tener varias inversiones relacionadas a la tecnología pero en un momento empezó a interesarse en seguir ampliando su cartera consolidando su presencia en el mercado inmobiliario de Santiago, aunque no tuviera ningún tipo de conocimiento previo.
Residente en Santiago desde hace diez años, Tomás inició su incursión en la inversión inmobiliaria hace cuatro años.
Por cuenta propia logró adquirir 2 departamentos. Sin embargo, cuando quiso empezar su segundo ciclo de inversión se encontró con un mercado completamente distinto al del “Boom inmobiliario” de los departamentos que se pagaban solos.
¿Cómo lograría invertir de forma rentable en este nuevo contexto de tasas altas y precios mucho más altos?
El encuentro con Gen Proactivo marcaría un antes y un después en su estrategia.
La estrategia propuesta por Gen Proactivo no solo le permitió encontrar propiedades a precios competitivos sino también estructurar el pago del pie en cuotas, evitando así una descapitalización significativa.
Así fue como Tomás amplió su cartera inmobiliaria añadiendo 2 departamentos más de forma simple y rentable, ubicados en la zona centro Oriente de Santiago.
Estas propiedades, seleccionadas por su potencial de valorización, se sumaron a sus inversiones previas, consolidando un total de 4 unidades.
La inversión de Tomás nos habla de los desafíos del mercado actual y como aún hay oportunidades que pocos conocen.
La identificación de proyectos verdaderamente atractivos en un mercado saturado requería de un análisis meticuloso y una estrategia bien definida.
Sin embargo, su experiencia previa y la orientación de Gen Proactivo le permitieron superar estas barreras, reafirmando la importancia de una inversión informada y calculada.
La historia de Tomás Fischer es un testimonio de que las metas de inversión inmobiliaria son alcanzables con la estrategia adecuada y el acompañamiento experto.